En verano pasamos muchas horas al volante. Fines de semana en la playa o desplazamientos de largo recorrido son situaciones cotidianas o, cuanto menos recurrentes. Por eso, en este post te contamos cómo proteger tus ojos cuando conduces porque, ¿quién no ha sufrido el deslumbramiento de un sol de última hora de la tarde al volver de pasar un día en la costa?
Proteger nuestros ojos, en estos casos, tiene una doble función: por un lado evitar molestias y enfermedades más o menos grave a largo plazo y por otro mejorar la seguridad vial.
En un estudio reciente la entidad automovilística RACE daba algunos datos muy interesantes a tener en cuenta a la hora de plantearnos la necesidad de contar con buenos hábitos para nuestros ojos en la conducción diurna:
– se estima que 1 de cada 4 conductores han sufrido una grave situación de deslumbramiento mientras conducía
– el 60% de los conductores españoles desconoce los efectos que una mala protección puede tener en nuestros ojos y en la seguridad vial
– el 38% de los conductores considera que conducir con el sol de frente es potencialmente peligroso
– el 45% reconoce no tomar ninguna medida de protección como conducir con gafas de sol
A todo esto debemos añadir que España es uno de los países en los que este riesgo se acentúa ya que por su situación es uno de los países con mayores índices de radiación ultravioleta.
Cuando estés pensando en viajar y no tengas claro el riesgo de exposición puedes visitar la web de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) donde podrás encontrar información actualizada sobre la previsión de radiación: si el índice de rayos UV es igual o superior a 3, es imprescindible que tomes precauciones.
¿Cómo puedes proteger tu vista mientras conduces?
Usa gafas de sol homologadas con filtro solar inferior al índice 4 y preferiblemente con cristales grises ya que respetan mejor los colores naturales.
Si además son polarizadas, estaremos protegiéndonos de los molestos reflejos que además de peligrosos elevan la fatiga asociada a la conducción. Además, este tipo de gafas nos muestran las imágenes con mayor definición y contraste por lo que nuestra agudeza visual mejora.
Si usas lentillas, recuerda que para estas ocasiones existen modelos que ya incorporan filtro solar. Si no lo llevaran, usa gafas de sol sin graduar.
Si llevas gafas graduadas, es imprescindible que tengas un par de gafas de sol adaptadas a tu graduación.
Cuando a pesar de tomar estas precauciones sufras un deslumbramiento, no frenes ni reacciones bruscamente, intenta reducir la velocidad progresivamente hasta que recuperes las condiciones de visibilidad.
Y, por último, no esperes a la renovación de tu permiso para conducir: revisa tu vista al menos una vez al año.