Rocío Romo es una de nuestras pacientes más especiales y queridas. A muy temprana edad, con sólo 3 añitos, fue diagnosticada de subluxación superior y temporal de ambos cristalinos y seis meses después descubrieron que padecía un cuadro completo del síndrome de Marfan.
Rocío llegó a nuestra clínica a los 5 años y el Dr. Cezón dio esperanza a su familia: colocaría a su hija lentes intraoculares. La operación fue un éxito.
Hoy, Rocío es mayor de edad y ha querido compartir su testimonio y agradecimiento con todos nosotros. Qué mejor manera de afrontar un 2015 lleno de esperanzas e ilusiones.